¿Reservas tiempo para los momentos mágicos de la Navidad?

¿Cómo organizas los días previos a las fiestas navideñas?

¿Dispones de tiempo de calidad para disfrutar sin estrés de estas fechas tan entrañables?

Con el encendido de las luces de Navidad, se da el pistoletazo de salida al periodo más peligroso para tu productividad.

Con el ambiente festivo de la Navidad, mantener la concentración, decir “NO” a las interrupciones y sacar adelante tu trabajo, es una labor de “Superhéroe Navideño”.

Es la época del año, que más afecta a nuestra productividad. Nos cuesta ser productivos.

Pero también, es el momento ideal para aprender a optimizar tu tiempo de calidad.

El descenso del nivel de trabajo de esta época, no debe ir acompañado de un exceso de relax.

Aprovecha para adelantar tareas y organizar el caos. Reflexiona, evalúa y analiza cómo administras tu tiempo.

El tiempo es el que es, pasa y no se recupera. Eso tú, no lo puedes gestionar. Pero sí puedes, dirigir tu vida, gestionarte a ti mismo y mejorar en la organización de tus proyectos, actividades personales y profesionales.

¿Cómo disfrutar en Navidad de tiempo de calidad sin mermar tu productividad?

Los días previos a la Navidad, suelen venir envueltos de reflexiones sobre el año que se nos va.

Frenamos el ritmo, para evaluar lo pasado y proyectar el futuro. 😉

• ¿Qué he aprendido?
• ¿En qué he fallado?
• ¿Qué podía haber hecho que no hice?
• ¿Alcancé mis metas?
• ¿Cumplí mis objetivos?
• ¿Todo lo que he hecho y he dicho me ha llevado a ser mejor persona?

Buscamos respuestas a porqués del pasado y a los cómo del futuro.

Cada año que pasa se cierra un capítulo más de tu historia.

Una historia con personajes que vienen y personajes que se van.

Una historia cargada de buenos y malos momentos.

Una historia acompañada de sonrisas y lágrimas. Iluminada de días soleados pero también de días grises.

Una historia con aromas dulces de abrazos y aromas amargos de desencuentros.

Y así es la vida que vivimos. Un recopilatorio de capítulos de doce meses de duración, que nos hacen madurar, enriquecernos como personas y evolucionar como seres vivos.

Tan solo el tiempo es nuestro. Pero pasa y no nos damos cuenta 😉

Un tiempo que para gestionarlo bien, requiere de rutinas que podamos seguir de manera mecánica.

Rutinas de nuestro día a día, que hacen que no tomemos conciencia del auténtico valor de ese tiempo.

No podríamos soportar la velocidad a la que nos movemos sin pararnos a pensar y evaluar.

No podríamos soportar la velocidad a la que nos movemos, sin las sonrisas, los abrazos y el amor de aquéllos que nos rodean.

No podríamos soportar la velocidad a la que nos movemos, sin sueños, ilusiones y metas.

No podríamos soportar la velocidad a la que nos movemos, sin un plan con una hoja de ruta.

Somos animales de rutinas. Nos mueven los hábitos y las costumbres. Sin ellos, nuestro día no tendría sentido, cuando suena el despertador.

Apagamos la luz, porque estamos cansados. Nuestra mente necesita liberarse de esa mochila pesada y cargada de emociones, por días intensos de movimiento.

El tiempo pasa más deprisa de lo que nos gustaría. Pero el tiempo es vida.

Y pasa sin que le dediquemos, unos minutos de nuestro día, a valorarlo y a darle las gracias, por esos segundos que son la chispa de esta vida 😉

Diciembre, es el mes de los balances personales y de los agradecimientos. Nos prepara para recibir a Enero, el mes de los buenos propósitos.

¿Por qué caminamos con tanta prisa sin disfrutar del presente y del tiempo de calidad que nos regala el hoy?

“Si amas la vida, economiza el tiempo, porque de tiempo se compone la vida” Benjamin Franklin

Conceptos como optimizar tu tiempo, organizar tus tareas o planificar tu día, para hacer más cosas y de manera más rápida. ¿Te ayudan a tener tiempo de calidad?

Cada vez disponemos de menos momentos especiales. De esos momentos, que te hacen olvidar la rutina 😉

Tener tiempo de calidad, para los momentos especiales, se está convirtiendo en un bien escaso y de lujo.

Y esa carencia de tiempo de calidad, está convirtiendo momentos especiales como la Navidad. En una obligación, más que en una oportunidad de disfrutar de las tradiciones.

En Navidad el ocio, las relaciones con la familia y entorno más cercano, cobran mayor importancia.

Conciliar vida, trabajo y productividad se convierte en misión imposible. Cuando el descontrol de horarios, comidas, cenas, fiestas, compras y planes con amigos, pasan a ser una prioridad marcada en nuestras agendas y calendarios.

Las luces y adornos en nuestras casas y ciudades, invitan al todo vale.

Y el aroma de los dulces y cocinas en plena acción, empujan a olvidarse de hábitos y rutinas del resto del año.

Pero el tiempo, es un recurso manejable. Y tú puedes intervenir y decidir la forma en que lo vas a utilizar esta Navidad 😉

Reflexiona, planifica y decide, cómo vas a manejar y gestionar tus actividades esta Navidad.

“El tiempo es el más escaso de los recursos y, a menos que se administre, ninguna otra cosa podrá administrarse”. Peter Druker.

¿Cómo encontrar en Navidad un equilibrio perfecto vida y trabajo, sin mermar tu productividad?

Resulta bastante difícil encontrar cierto equilibrio, cuando se vive a remolque de los acontecimientos, sin saber en qué punto te encuentras, porque estás desbordado por infinidad de tareas.

Es la consecuencia, de la falta de previsión, de la desorganización, del descontrol y de no dar el valor que se merece a tu tiempo y productividad.

Esta Navidad regálate equilibrio 😉

Cómo encontrar en Navidad el equilibrio perfecto vida y trabajo #productividad Clic para tuitear

Aplicando la regla del “8 X 3”.

8 horas de trabajo + 8 horas de ocio + 8 horas de descanso = TU DÍA

En Navidad, los días también tienen 24 horas. No somos Reyes Magos y no los podemos estirar. Pero más que nunca, debemos repartir nuestras 24 horas de tiempo, de manera organizada y planificada.

El secreto para que esta Navidad no merme tu productividad, está en planificarla de manera adecuada con unos objetivos claros y muy bien definidos 😉

Para que tu jornada laboral, sea más llevaderas estos días.

• Mantén al día tus tareas rutinarias.
• Elabora un menú navideño, de tareas más light y prioriza sobre esas tareas de tu menú navideño.
• Condimenta tu primer y segundo plato de tareas importantes. Y deja para el postre las menos relevantes, que engordan como un polvorón y solo aportan calorías a tu productividad.
• Si el café y la copa, no forman parte de tu actividad principal, delega y comparte esa parte de tu menú con una persona de confianza.
• Cronometra tu tiempo y aplica la Técnica Pomodoro. Bloques de 25 minutos de trabajo concentrado y sin interrupciones. Seguidos de pequeños descansos. Todo un reto en Navidad.
• Aprovecha y optimiza tus recursos.
• Elimina todo esfuerzo innecesario. Simplifica. Y apaga el dispositivo multitarea.
• En Navidad, “Los ladrones del Tiempo”, vienen adornados de indisciplina. Y entran por la chimenea de tu día a día, con cuestiones supérfulas y prescindibles. Renuncia a este tipo de adornos, no aportan y te convierten en un esclavo del caos, la desorganización y los errores.

Perdiendo el tiempo con determinación.

O lo que es lo mismo. Invirtiéndolo en aquello que merece la pena para ti. En las áreas importantes de tu vida.

Ordena tus prioridades y concede más tiempo a tu familia 😉

Nos pasamos la vida corriendo de un lado a otro. Sin pararnos a pensar, en esas distracciones cotidianas e innecesarias,  que nos roban tiempo importante y que te alejan de tus seres queridos.

Revisa, observa y analiza las diferentes áreas de tu vida (pareja, familia, amigos, ocio, salud, deporte, trabajo, estudios).

¿Qué porcentaje de tiempo dedicas a cada una de ellas?

Pierde tu tiempo con determinación en buscar y encontrar mejoras, para llevar una vida más equilibrada y satisfactoria.

Aprovechando la magia de las relaciones personales.

No conviertas internet o la televisión en un medio de escape. El cariño no se puede suplantar por tecnología. 😉

Rescata valores y no dependas de los objetos para ser feliz.

Fortalece lazos con colegas, colaboradores, clientes y con tu equipo.

Estrecha tus lazos afectivos con tus seres más queridos.

Nadie tiene la vida comprada. Aprovecha y llama a esa persona con la que deberías reconciliarte.

Recupera abrazos perdidos. Es tiempo para olvidar y disfrutar 😉

Es época de regalos, que tu mayor regalo sea agradecer lo recibido este año.

Dedicándote tiempo a ti mismo.

La confianza en uno mismo es el primer secreto del éxito. Y para cultivarla, simplemente tendrás que trabajar en tus hábitos.

En esos hábitos que te hacen sentir mejor por dentro y por fuera 😉

Fortalece tu interior practicando los hábitos de la lectura y escritura.

Reserva tiempo, para escuchar esa magia, de la música que llevas dentro de ti 😉

La Navidad está cargada de tradiciones, hábitos y rutinas.

El 31 de diciembre despedimos el año en España, con las 12 uvas de la suerte. 12 uvas que simbolizan los 12 meses del año.

12 uvas que podrían simbolizar los puntos clave para tu productividad y gestión eficaz de tu tiempo. 😉

Puntos clave para tu productividad simbolizados en las 12 uvas de la suerte Clic para tuitear

¿Qué puntos clave de la productividad podemos simbolizar con las 12 uvas de la suerte?

1.- Definir los objetivos que marquen tu dirección.

2.- Autodisciplina para dirigir tus esfuerzos a cumplir los objetivos.

3.- Priorizar sobre lo importante que te acerca a los resultados.

4.- Planificar el recorrido de tus acciones.

5.- Prever para poder anticipar tu respuesta a los sucesos.

6.- Organizar para mantener el orden. Siendo selectivo, filtrando y asignando un lugar a cada cosa.

7.- Optimizar aprovechando los recursos sin despilfarrar ni malgastar.

8.- Delegar aprovechando el apoyo y colaboración de otros profesionales, practicando la cultura del trabajo en equipo.

9.- Simplificar reduciendo lo complejo. Convirtiendo las tareas en sencillas y fáciles de abordar.

10.- Eliminar, descartar y rechazar lo que no aporta. “Practicar el NO”

11.- Concentrase en lo importante.

12.- Disfrutar con equilibrio, armonía y libertad del camino, siendo creativo y resolutivo.

Otra tradición que acompaña a la Navidad, viene en formato de tarea. “Escribir la carta a los Reyes Magos”.

Un bonito ejercicio para reflexionar, sobre el valor de las cosas y con honestidad, establecer esas prioridades de cosas importantes para ti 😉

Pero no te limites a una lista de prioridades materiales. Saca lo mejor que hay dentro de ti.

“El tiempo es el mejor autor: siempre encuentra el final perfecto” Charles Chapiln.

Mi final es un deseo. Un deseo que recuerdes y te ayude a mejorar tu productividad durante y después de la Navidad. 😉

“Deseo que esta Navidad,

No sobrevivas cargado de tareas innecesarias. Que pongas tu foco en lo importante, en aquello que es esencial.

VIVAS con mayúsculas y plenitud, tu tiempo. Con la sensación siempre, de haberlo aprovechado.

Elijas con libertad tu ritmo. El que sea más adecuado, para cada momento y para cada tarea.

Dibujes con flexibilidad y armonía, el camino de tus objetivos. Proyectando con ilusión, cada paso que des. Imaginando los resultados y disfrutando viendo las fotografías de lo alcanzado.

Que sueltes lastre, viajes ligero de equipaje y simplifiques tu vida. Encontrando la optimización y aprovechando los recursos.

Tú y solo tú, eres el protagonista de tu productividad.

Mi deseo es solo un desafío, para que lo des todo para mejorarla”

Aquí lo dejo. Agradeciéndote tu tiempo y compañía durante todo este año. 😉

No puedo meter el espíritu de la Navidad en un cofre mágico, para regalártelo cada mes del año. Pero sí puedo, aprovechar el reflejo de sus valores. Y bajo la luz de una vela blanca simbolizando paz y tranquilidad, aromatizando este momento, con la calma del olor a vainilla que desprende. Abrirte con generosidad mi corazón para desearte  «FELIZ NAVIDAD».

Un fuerte abrazo, siempre #conunasonrisa

Yolanda 🙂