¿Quieres avanzar en tu proyecto o te quieres apalancar?

¿Para avanzar te tienes que matar a trabajar?

¿Cómo representas tu proyecto?

Da igual como sea tu proyecto emprendedor, si buscas el éxito, empieza a trabajar tu estrategia. Que tu primer paso sea, superar el miedo a delegar.

Si estás creciendo tienes que ser capaz de adaptarte a las nuevas necesidades.

¿Qué dirección vas a seguir?

¿Qué acciones vas a realizar?

¿Cómo combatir tu miedo a delegar?

delegar

 

Un proyecto no crece de la noche a la mañana, requiere de tiempo y esfuerzo. Y por pequeño que seas y estés tú solo, vas a necesitar deshacerte de la inseguridad, perder el miedo a delegar y trabajar la confianza.

 ¿Cómo representas tu proyecto?

En el Post de “Un Fondo de Armario para tu negocio” te hablaba de esos básicos que no pueden faltar en tu negocio para que sea exitoso y sin los cuáles no existe empresa:

1.- Estrategia e Iniciativa

2.- Producto/Servicio

3.- Organización y Planificación

4.- Clientes

Y además les acompañábamos de color, reflejado en tu imagen de marca personal.

Has superado ésta etapa con éxito y necesitas subir un escalón más.

No pongas excusas, busca alternativas, aprovecha la oportunidad porque Delegar es confiar Clic para tuitear

 Para avanzar vamos a dividir la operativa de tu negocio en 6 áreas.

1.- El área de gestión.

Lo que podríamos definir la parte directiva. Eres el capitán de tu barco, tienes un destino, cumplir un objetivo. Y una estrategia para llegar a él. Como buen estratega deberás planificar, organizar, coordinar y controlar.

La dirección de tu proyecto y negocio te corresponde a ti

2.- El área Comercial.

La parte más activa y social. Contar al mundo qué vendes y visualizar cómo lo vendes, qué haces para vender y qué necesitas para vender.

Aquí entra en juego también la parte de marketing de tu negocio.

3.- El área Contable y Financiera.

Desde dónde llevas el control de tus transacciones y gestionas tu tesorería.

4.- El área Productiva.

El conjunto de actividades que engloban la prestación de tu servicio. Que van desde la realización del servicio como tal, hasta las labores de investigación, desarrollo e innovación.

5.- El área Administrativa.

Necesaria para tener organizada y controla toda la parte documental y burocrática de tu negocio. Imprescindible para una eficaz atención a tus clientes y proveedores. Y el punto de unión y referencia entre colaboradores de diferentes áreas.

6.- El área Legal.

Desde donde se hacen todos los trámites para cumplir con los requisitos legales que exige cualquier proyecto de emprendimiento. Como la redacción y revisión de documentos mercantiles, obligaciones fiscales y protección de datos.

¿Qué necesitas o a quién necesitas para tener atendidas tus seis áreas?

Eso va a depender del tamaño de tu negocio.

Hoy, quién gestiona todas esas áreas, posiblemente seas tú. Y sólo hay una razón para ello, el miedo a delegar.

¿Qué habilidades tienes y cuáles deberías adquirir para dirigir tu negocio?

Tu proyecto emprendedor está relacionado con una actividad, que se te da muy bien, te gusta y te motiva. Es tu vocación. Y además, tienes capacidad de dedicación.

Esta es tu FORTALEZA  muy ligada al área PRODUCTIVA de tu negocio.

Si has decidido emprender es porque aparte de ejercer muy bien tu profesión tienes otras habilidades, las necesarias para dirigir la gestión de tu negocio.

¿Te acuerdas del Área 1, la parte de la GESTIÓN?

Esas habilidades son:

  • Planificar
  • Organizar
  • Dirigir
  • Controlar

Son habilidades que se desarrollan y aprenden. No tienes que nacer con ellas.

Pero además deberás saber negociar, perseverar, controlar tus emociones, aprender los comportamientos y los protocolos necesarios para tus relaciones sociales. Y por supuesto perder el miedo a delegar.

Una parte muy importante de tu marca personal y que te diferencia es tu capacidad de comunicar y transmitir emociones

Habilidad esencial para dominar el área COMERCIAL de tu negocio.

Ya tienes tres áreas cubiertas. La parte de la GESTIÓN, la COMERCIAL y la PRODUCTIVA. Y una sola pieza que las gestiona, TÚ.

¡Felicidades! un solo puesto de trabajo para cubrir tres áreas 😉

¿Qué pasa con el resto de áreas? La CONTABLE y FINANCIERA, la ADMINISTRATIVA y la LEGAL.

 Posiblemente las gestiona la misma pieza, mejor dicho “las torea”.

 ¿Cómo consigue una misma pieza estar en todos los frentes?

Sacrificando su esfuerzo, abandonando su productividad y malgastando su tiempo.

 ¿Qué tal si empiezas a priorizar sobre la parte productiva de tu negocio, te enfocas en su gestión y el resto lo DELEGAS?

Si no lo has hecho ya es por miedo a delegar.

 ¿Cómo se supera el miedo a delegar?

Combatiendo la inseguridad y trabajando la confianza.

 ¿Por qué ese miedo a delegar?

La palabra “delegar” es simplemente un verbo muy abstracto, que define una acción relacionada con un proceso de traspasar a un colaborador una tarea y responsabilidad.

 A lo que realmente tienes miedo es a:

  • Perder el control de tu negocio
  • Perder la visibilidad de una parte de tu negocio
  • Perder al cliente

Y combates ese miedo al que mal llamamos «Miedo a Delegar» rodeándote de obstáculos, reflejados en inseguridad y desconfianza.

  • No sé por dónde empezar ni el qué delegar
  • Nadie lo hace tan bien como yo
  • Soy imprescindible, mi negocio soy yo
  • Pierdo más tiempo explicándolo que haciéndolo
  • Sólo yo sé hacerlo
  • Es una tarea muy sencilla, no merece la pena pagar por ello
La habilidad de asignar tareas y otorgar responsabilidades es un arte. Aprender a delegar una actitud Clic para tuitear

 

¿Quieres empezar a delegar?

Empieza a Delegar con cuatro pasos muy sencillos:

1.- Define pequeñas tareas que delegar.

Si hablamos del área administrativa de tu negocio, puedes empezar delegando el seguimiento de algunos clientes, la emisión de facturas, el envío de presupuestos o la atención de una cuenta de correo que te sirva como filtro.

En estas dos entradas tienes dos ejemplos de tareas por las que puedes empezar:

Siempre hay tareas que delegar, se trata de que las encuentres. Y sé muy bien de lo que hablo, te recuerdo que soy Secretaria Virtual y mis servicios están muy relacionados con éste verbo.

Y externalizar este tipo de tareas y servicios es un recurso al alcance de todos.

2.- Elige a la persona apropiada.

Un perfil alineado con tu marca, dispuesto al trabajo en equipo y con habilidades de comunicación, experiencia y disponibilidad.

3.- Define objetivos.

Se trata de explicar, no de decir lo que hay que hacer. Recuerda que has elegido a un profesional. Escúchale, un aporte de creatividad nunca viene mal. Confía en su compromiso y no limites su autonomía, eso desmotiva.

Tu colaborador es parte de tu equipo. Si has elegido bien te sorprenderán los resultados y lo rápido que puedes avanzar 😉

4.- Trabajo en equipo.

Organiza reuniones cada cierto tiempo, para revisar el estado de las tareas, evaluar resultados, felicitar si son positivos, corregir errores y encomendar nuevas tareas.

Es importante que cuentes con un protocolo de «trabajo en equipo».

Valorando su trabajo conseguirás motivar, reforzar vuestra relación de confianza y obtener un compromiso duradero en su gestión.

 ¿Qué consigues con estos cuatro pasos?

  • Perder el miedo a delegar.
  • Optimizar tu tiempo, aumentas tu tiempo disponible para pensar en nuevas ideas e innovar.
  • Optimizar tu esfuerzo, aumentas tu motivación.
  • Mejorar tu productividad, cumples metas y objetivos relacionados con tu área.
  • Fomentar el trabajo en equipo, estableces relaciones de confianza.
  • Combatir la soledad del emprendedor.
  • Reducir el estrés y la ansiedad.

Muchas veces nos volvemos locos buscando herramientas, para ser más productivos y optimizar nuestro tiempo y quizás subir un escalón, sea el resultado de un paso tan sencillo como es el “delegar”.

Míralo como una inversión en tu tiempo 😉

Y para terminar un consejo, sobre dos tareas que nunca deberías delegar:

  • La gestión de tu negocio. Tu estrategia. El timón de tu barco.
  • Lo que tú haces y te apasiona. Lo que te define como profesional.

El resto de las tareas siempre se pueden delegar:

  • Las rutinarias y repetitivas
  • Las que no tienes tiempo de hacer
  • Las que no te gusta hacer
  • Las que no sabes hacer

Estar al límite de tu capacidad de trabajo no es saludable.

“Si buscas resultados distintos no hagas siempre lo mismo Albert Eistein

Después de leer éste Post:

 ¿Cuál es tu actitud?

  • Seguir haciendo lo mismo y mantener tu postura de inseguridad
  • Confiar y trabajar en lo que te gusta de manera saludable

Como siempre, recordarte que puedes comentar en el blog.

Será interesante conocer tu opinión y cuáles son tus miedos a delegar.

Un fuerte abrazo,

Y recuerda a “Delegar es Confiar” siempre #conunasonrisa

Yolanda 🙂