¿Quieres aprovechar las vacaciones para aprender a ser más productivo?

¿Cómo desprenderte de hábitos antiguos e incorporar nuevos hábitos productivos en tu día a día?

¿Qué nuevos hábitos productivos incorporar a tus rutinas?

¿Eres eficiente gestionando tus energías?

Hace mucho calor y tus ganas de trabajar están al mínimo. En verano las tentaciones son mayores, atacan a tu fuerza de voluntad y merman tu productividad.

Tomarte un respiro en verano es básico para tu organismo. Además debes parar y reflexionar. Porque si no desconectas unos días al final te quemas.

Hábitos Productivos

Cuando llevas demasiado tiempo haciendo una misma actividad, tu capacidad de atención y productividad caen en picado.

Las vacaciones de verano son la gran oportunidad de recargar pilas, coger energía, activar tu cuerpo y mente para la llegada del invierno.

Pero también es un buen momento para reinventarse y trabajar esos hábitos productivos que has descuidado de tus rutinas.

¿Qué tal aprovechar las vacaciones de verano para trabajar esos hábitos productivos descuidados que afectan a tu productividad personal?

El verano es una buena época para organizar el desorden, hacer balance y formatear el disco duro. 😉

¿Por dónde empezar?

Haz un balance y analiza, porqué no eres más eficaz.

  • ¿En qué se ha ido tu tiempo estos últimos meses?
  • ¿No sabes en qué has perdido el tiempo y sigues cerrando los ojos para no ver?

Coge lápiz, papel y anota 😉

Tienes un negocio dividido por áreas.

Quizás si hubieras subido ese escalón, hoy te costaría menos olvidarte del trabajo y marcharte de vacaciones.

Cuando sepas en qué se te va el tiempo, podrás empezar a hacer cambios

El primero formatear tu disco duro, deshacerte de los hábitos antiguos e incorporar nuevos hábitos productivos a tus rutinas.

¿Qué tal despedirte de la multitarea y de la procrastinación? 😉

Estas vacaciones:

  • Haz una revisión de ti mismo y visualiza las cosas importantes de tu vida y de tu trabajo.
  • Toma decisiones.
  • Vacía tu mente.

En el post ¿Qué significado le das a optimizar el tiempo? Te diferencié entre gestión del tiempo, optimización del tiempo y productividad personal.

Quizás antes de hablar de gestionar el tiempo y de productividad personal deberías aprender a gestionar tus energías. Algo muy relacionado con tus hábitos productivos.

Si te conoces a ti mismo podrás cambiar tus hábitos 😉

Recuerda que un hábito es algo tan sencillo cono una elección que hiciste en un momento concreto, que has incorporado a tus rutinas y que realizas de manera mecánica.

A través del hábito ahorras esfuerzos, ya que con esas acciones rutinarias, consigues que tu cerebro no tome decisiones y se relaja

Esa pequeña elección en forma de hábito sumada a otras elecciones, son pequeños detalles que ejercen un gran impacto en tu productividad.

¿Existen diferentes tipos de hábitos?

Una buena clasificación sería ente hábitos positivos y hábitos negativos.

Otra clasificación podría ser entre hábitos saludables, productivos y tecnológicos.

Clasificar es tan sencillo como enumerar todos tus hábitos y realizar tú propia lista con nombre y apellidos

Para mí cualquier hábito incorporado en mis rutinas que me haga ser más productiva es un hábito positivo. Y todo hábito que me haga perder el tiempo un hábito negativo.

Es evidente y básica esta reflexión.

¿Qué hábitos hacen que tu día valga la pena y se conviertan en hábitos productivos?

Tú día a día está sometido a una gran tensión. Para que tengas una vida sana y saludable necesitas trabajar de manera consciente tres hábitos que son los relacionados con tu descanso, alimentación y ejercicio. Tu cuerpo.

¿Cómo gestionas tú ansiedad?

A través del ejercicio. Puedes caminar, correr, nadar o bailar.

Es indiscutible que practicando algún tipo de ejercicio vas a mejorar tu capacidad física y mental. Haz algo que te guste y te motive. Sin olvidar tu edad, condición física y lesiones.

Son muchos los beneficios del ejercicio, te cito dos que a mí me motivan:

  • Mantener el tono muscular me ayuda a tanto a nivel de postura como de energía. La musculatura de tu cuerpo es uno de los indicadores de envejecimiento. No pierdas el tono muscular antes de tiempo.
  • Al practicar ejercicio consumes calorías y consigues mantener un equilibrio con tu peso corporal.

¿Cómo gestionas tú energía?

A través del descanso, relajación, meditación y respiración. Y por supuesto con una buena alimentación.

Durmiendo más conseguirás terminar más cosas. En momentos de poca energía para y haz una pequeña siesta.

Las prisas y el estrés provocan un estado continúo de tensión. Por no hablar de las malas posturas

Incorpora a tus rutinas el hábito de relajarte y dedicar a tu día unos minutos de tranquilidad. Conseguirás reducir la ansiedad.

Existen diferentes técnicas de meditación. Encuentra la que mejor se adapte a ti.

Puedes tomar como punto de referencia un objeto, un sonido o movimiento para focalizar tu atención.

Una de las técnicas más sencillas y quizás la más usada es la de tomar como punto de enfoque la respiración.

Existen diferentes técnicas de yoga con las que practicar la respiración.

Y sobre la alimentación podríamos generar tú y yo un debate.

Simplemente mantén una dieta equilibrada con los nutrientes necesarios y sin caer en el sobrepeso. Deja de comer antes de llenarte.

Y escucha a tú cuerpo para saber qué comer, qué alimentos son los que mejor te sientan y en qué cantidad.

La persona más importante en tu vida eres tú 😉

¿Cómo quieres sentirte y cómo quieres hacer sentir a los demás?

Si empezamos la cadena de optimización de tu tiempo, hablando de gestionar tu energía. Presta atención a tu cuerpo y cuídate.

Recuerda: descanso, alimentación adecuada y ejercicio 😉

Aprovecha las vacaciones y corrige los desastres.

Hábitos Productivos

Dicen que mejor hecho que perfecto. Soy de las que prefiere hecho y perfecto. Y para conseguirlo, no hay otra que una dedicación extra a los hábitos productivos.

Muy relacionados con la organización, planificación y gestión del tiempo.

Ya te hablaré del método GTD, me encanta.

Te voy a enumerar algunas de mis rutinas diarias:

  • Cada día priorizo sobre una cosa.
  • Empiezo por las cosas sencillas para calentar motores.
  • Uso la regla de 80/20. El 20% de mi trabajo produce el 80% de mis resultados.
  • Me centro en lo importante es la forma de terminar con lo urgente.
  • Antes de empezar he decidido el resultado.
  • Ideas que no puedo trabajar ahora las anoto en mi libreta.
  • Ignoro a los demás a través del NO. Porque es imposible atender a todo y a todos.
  • Limito las respuestas de mis emails.
  • Mantengo limpio y ordenado mi entorno de trabajo y las herramientas que no utilizo las descarto.
  • Lo decisivo es productivo. Visualizo el final de mi día y hago mi mapa mental.

Voy a compartir contigo dos hábitos productivos que he incorporado en mí día a día y me facilitan estas rutinas:

Mi primero de los dos hábitos productivos es dedicar la primera hora de mi día a mi organización. Eso me obliga a levantarme una hora antes, pero consigo centrarme en lo importante desde ese mismo momento.

Repaso mis objetivos y visualizo si he cumplido lo que me he propuesto. Reviso mi agenda y preparo mi día. Organizo mi bandeja de correo y gestiono mis redes sociales.

Todo eso con la compañía de mi cuaderno, agenda, boli big, un zumo de naranja y un café con cereales.

El segundo de mis hábitos productivos y que está cambiando mi vida es salir a caminar rápido una hora.

Sentarme a trabajar medio dormida, no me hace ser más productiva. Después de 7 horas de inactividad, necesito oxigenar mi cerebro, tonificar mis músculos y mover el esqueleto. Al practicar mi rutina con música, la positividad y buen humor aceleran mi organismo.

Y después de una buena ducha y vestida para la ocasión, a trabajar 😉

Porque aunque trabaje desde casa me gusta sentirme guapa, cuidar mí presencia y estar perfecta para mí.

Otro hábito convertido en rutina y que ayuda a tener muy buen humor. 😉

Prueba a caminar este verano. Después de 30 días, tendrás un nuevo hábito que lo habrás convertido en rutina y a tu regreso de las vacaciones formará parte de las tareas de tu día a día. El objetivo de este hábito está relacionado con la gestión de tu energía.

Me vas a decir, que no tienes tiempo para caminar, que no dispones de una hora y que tus horas de sueño son sagradas.

¿Y tu bienestar?

El descanso es muy importante y es uno de los pilares a trabajar en la gestión de tu energía.

Descansa las horas que necesites, pero no te acuestes pensando que te tienes que levantar una hora antes. Eso no funciona. Lo retrasarás

Mi motor de arranque es mi caminata. 😉

¿El tuyo?

Hábito nº 1 EJERCICIO.

El primer hábito a incorporar a tus rutinas es caminar para oxigenar tu cerebro Clic para tuitear

Con el ejercicio consigues activar tu cuerpo.

¿Qué pasa con tu mente?

Activa tu mente mediante el aprendizaje de cosas nuevas. Es una técnica que te ayudará a ver las cosas más fáciles y con mayor claridad.

A través de la lectura incentivas tu aprendizaje y es un apoyo más a tu proyecto

El hábito de la lectura es uno de los más propensos a descuidar en el invierno.

Siempre me verás con un libro de papel, en el que poder tomar notas.

Los libros son mi fuente de inspiración en cualquier época del año.

¿Cuál es la tuya?

Te propongo dedicar parte del tiempo de tu lectura estas vacaciones a algún libro que te ayude a mejorar tu productividad personal. 😉

Esta son algunas de mis propuestas:

Hábito Nº2 LEER

Con el hábito de la lectura renuevas tus ideas Clic para tuitear

A través de la lectura te van a surgir nuevas ideas. Estoy segura porque a mí me pasa. Y algunas de ellas incluso te arrastrarán a cambiar algunas de tus prioridades.

¿Cómo priorizar sobre tus prioridades?

Renovándote. Y para renovarte primero debes de vaciarte de todo aquello que te sobre y no te deja avanzar. Ayúdate dedicando 10 minutos al día a la meditación.

Es un hábito complicado y que a mí me está costando convertir en rutina. Es una de mis prioridades para estas vacaciones. 😉

Es complicado aprender a meditar. Lo ideal sería poder dedicar unos días a aprender a encontrarte con tu bienestar y paz interna disfrutando de un retiro de paz interior. Yo no lo descarto a medio plazo. Ya tengo elegido el sitio.

Pero si no puedes, siempre tienes soluciones intermedias, libros y aplicaciones gratuitas como ayuda a  sobrevivir el día a día.

Yo me he descargado una aplicación y espero que el mar también ayude. 😉

Y a parte he seleccionado dos lecturas, que espero me puedan facilitar la tarea.

Este último una guía ideal repleta de momentos de felicidad. La herramienta perfecta para pasar de la reflexión a la acción. Con 40 claves para crear tú destino.

Hábito Nº3 MEDITAR

Crea el hábito de meditar para mejorar tu bienestar Clic para tuitear

Vives rodeado de prisas y urgencias. Demasiada conectividad e internet.

Tu tiempo es oro, dedícalo a lo que verdaderamente lo merece. La vida como dicen las personas mayores pasa en un suspiro.

Toma conciencia de ella, trabaja tus hábitos productivos y “Vive la Vida” 😉

Toma conciencia de la vida y trabajas tus hábitos productivos Clic para tuitear

Seguir estos consejos, es mi mejor consejo 😉

  • No hagas de la indecisión una rutina. Los miedos y algunas tradiciones convertidas en hábitos no te van a ayudar.
  • Deja atrás tu zona de confort, como parte de tu pasado y usa tu presente como una oportunidad.
  • Gestiona tus energías y céntralas en aquello que es importante para ti. Tú mismo.
  • Vive de lo que mejor sabes hacer y de tus pasiones.
  • Comparte esa vida con tu familia, amigos y conocidos. Porque siempre hay un motivo por el que luchar.

¿Quieres vivir de forma plena y efectiva?

Te comparto este post de mi amigo Agustín Grau con «100 cosas para hacer que tu día sea pleno»

  • Disfruta del trayecto. La vida es un viaje muy corto. Y aprende todo lo que puedas mientras dura el viaje.
  • Tu pasado y los malos momentos no te van a ayudar. Despréndete de ellos, no te pongas límites. Cuídate y valórate.
  • Y si nos lo has hecho ya, suscríbete a mi newsletter, descarga y lee la guía que te regalo con recursos que te ayudarán a optimizar tu tiempo. 😉

¿Qué tal  aprovechar tus momentos de alto nivel de energía e implementar tus rutinas en base a ellos?

Aprovecha las vacaciones, focaliza esos momentos. Recibirás una señal, genera con ella un hábito y conviértelo en tu rutina, te prometo que obtendrás una recompensa 😉

Cuando pienso en las vacaciones no sólo organizo un viaje, también planifico mi tiempo libre para disfrutar en otro entorno de mis hábitos de caminar y leer.

Estas vacaciones incorporo uno nuevo la meditación. Con la intención de a mi regreso en septiembre iniciarme en el Yoga.

Disfruta del verano y de las vacaciones. Si puedes, quieres y te apetece ya sabes que te espero en los comentarios.

Me gustaría conocer tus hábitos productivos.

Y recuerda que tus acciones diarias son las que te llevarán a tu futuro 😉

Me marcho unos días, pero seguiré muy pendiente de ti. Es una de mis rutinas, cuidar a mi ecosistema social y en vacaciones con mayor razón.

Un fuerte abrazo y te veo a la vuelta del verano.

Siempre #conunasonrisa

Yolanda 🙂